Mecánico de cabezas
Yo me considero un timador
Porque le cobro a la gente
por ajustarle las tuercas
Terra&nova
Categoría: Unas lineas
Poema con 10 palabras
Ejercicio: Escribir un poema utilizando 10 palabras.
Amor, comer, correr, montaña,cuento, especialidad,status, calidad, lago , necesario.
Es necesario entender
que aveces no se puede sólo correr
Comerse el amor con cuchara
y huir lleno a una montaña
Finguiendo que no pasa nada
consumiendo todo con infinito talento.
La calidad de la vida decae
y nuestro status aumenta.
Ahogamos las promesas en un lago lleno de futuro
con la especialidad de un sicario.
La vida se vuelve un cuento tétrico
En donde nosotros no somos los heroes.
Taller de Readcción Creativa USM
Reflexionando desde Facebook
~ Del post de un Facebook-Friend
»Una persona te odia por 3 razones. 1)Quiere ser como usted 2)Se odian a sí mismos 3)Te ven como una amenaza.»
John Romero
Yo creo que si podria describirse así, pero es muy general.
Según mi Opinión a los envidiosos (porque el odio ya es algo muy profundo) no les importan las personas, ni las caras bonitas, ni los títulos académicos refinados como tales. Les interesa y les corroe por dentro lo que puedes obtener con todo eso, porque es algo que por algún motivo no lo pueden poseer.
Tienes algo que ellos desean
Y de eso se deriva lo demás. Puede que este inconforme consigo mismo porque no ha podido conseguir lo que desea y podría transformarse en un resentido social, en una persona fastidiosa, antipática, en resumen no nos cae bien. O a trabajado tanto por conseguirlo y es tan importante para el que teme de la capacidad de las demás personas que podrían disminuir el valor de lo conseguido o pero aun arrebatárselo.
Concluyo que es un poco vanidoso creer que el interés es hacia uno, en realidad están mirando a un concepto más grande.
La realidad existe solo para quienes saben sobrepasar
los miedos
los problemas
los complejos
Para todos los demás es inevitable omitirla
ya sea por piedad
consideración
o por los mismos
miedos
problemas
y complejos
Si las miradas pueden corromper al tiempo
Y someterlo a parar
Las caricias silenciar las responsabilidades
Para olvidar las ataduras
Los recuerdos aún más poderosos
Que el mismo momento
Nos obligan a soñar
Y vivir como ayer
Lo que ya dejo de ser
Locas Aquellas Mujeres
Locas serán
Las mujeres perdidas
Que no salen
De la rutina
Contenidos por
Camisas de posturas
Y sedadas
Por canciones de Arjona
Hablando Senilmente
Sobre autos nuevos
Casas, lujos y electrodomésticos
Sostengo Rotundamente
Que las locas son ellas
Aunque a mi me quieran
Poner la camisa de fuerza.
Con los años uno se vuelve bruto, porque se comienza a creer lo que la sociedad nos dice.
Mi forma de ser es un resultado de mi propia vanidad
Limbo
Paralizada observe
El liquido indistinguible que fluía de ti
De tus recuerdos
Que continuaban eternamente unidos
Por las manchas de mis manos
La tensión empañó el puñal inexistente
Y sostuve el silencio frente a nuestras miradas
Inertemente vivas pero sin emoción
Mientras el tiempo en desesperación se suicidaba
Y el espacio, conmocionado
Se tapo los ojos
El espíritu cerrajero
Hace ya algunas décadas le robaron a mi abuelo la llave de un baúl. Mi abuela, mi madre y mis tíos sostenían crédulamente que se le había perdido en uno de sus muchos descuidos. Pero mi abuelo me contó la verdad.
Allá en los terrenos de la finca hubo un hombre feliz que poseía todo lo que alguien pudiese desear. De la envidia y mala voluntad de muchos llamaron a un espíritu de mujer que había sido abandonada en vida. Le ofrecieron cartas de amor de robadas de los amantes jóvenes del pueblo para que se alimente de su amor, a cambio de que se encargara de aquel hombre prospero.
Aquella noche la mujer tomo la sabana que cubría al hombre envidiado, la acaricio y la dejo caer sobre él, en ella quedaron pegados todos los sueños y deseos del hombre prospero.
A la mañana siguiente, como de costumbre guardaron las sabanas usadas en un baúl, el cual jamás pudo volver a abrirse. A partir de ese mañana vacía el hombre vivió mal, perdió las gana de trabajar, la paciencia que le traía fortuna y la caballerosidad que sostuvo siempre con sus conocidos. Agobiado por haber perdido el impulso de ser como él era comenzó una vida de vicios.
La mujer apenada por sus acciones le susurro la verdad en un sueño, después de meses de noches malas.
Al final de los meses caóticos, este hombre murió en desesperación con el martillo en mano y el baúl ileso.
Desde entonces su espíritu busca desesperadamente cerraduras por abrir con la esperanza de recuperar sus sueños.
Terra&Nova
18 de abril de 2011
Terra & Nova 